18 de septiembre del 2016: 25o Domingo del Tiempo Ordinario (C)
Una alabanza desconcertante Jes ús nos invita a ser hábiles en el Servicio al Reino de Dios. El dinero puede ser buen servidor pero también mal patrón. Nos corresponde elegir: Dios o el dinero? Lectura del santo evangelio según san Lucas (16,1-13): En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Un hombre rico tenía un administrador, y le llegó la denuncia de que derrochaba sus bienes. Entonces lo llamó y le dijo: "¿Qué es eso que me cuentan de ti? Entrégame el balance de tu gestión, porque quedas despedido." El administrador se puso a echar sus cálculos: "¿Qué voy a hacer ahora que mi amo me quita el empleo? Para cavar no tengo fuerzas; mendigar me da vergüenza. Ya sé lo que voy a hacer para que, cuando me echen de la administración, encuentre quien me reciba en su casa." Fue llamando uno a uno a los deudores de su amo y dijo al primero: "¿Cuánto debes a mi amo?" Éste respondió: "Cien barriles de aceite." Él le dijo: "Aqu