4 de diciembre del 2020: viernes de la primera semana de Adviento
(Isaías 29, 17-24 ) Los humildes y los pobres estarán alegres! Los ciegos al final verán! Es el mundo al revés, o quizás mejor puesto al derecho. Que en este Adviento, Jesús nos sane de nuestras cegueras para que volvamos a encontrar el verdadero sentido de las cosas. Primera lectura Lectura del libro de Isaías (29,17-24): ESTO dice el Señor: «Pronto, muy pronto, el Líbano se convertirá en vergel, y el vergel parecerá un bosque. Aquel día, oirán los sordos las palabras del libro; sin tinieblas ni oscuridad verán los ojos de los ciegos. Los oprimidos volverán a alegrarse en el Señor, y los pobres se llenarán de júbilo en el Santo de Israel; porque habrá desaparecido el violento, no quedará rastro del cínico; y serán aniquilados los que traman para hacer el mal: los que condenan a un hombre con su palabra, ponen trampas al juez en el tribunal, y por una nadería violan el derecho del inocente. Por eso, el Señor, que rescató a Abrahán, dice a la casa de J