(Jonás 3, 1-10) ¡Increíble, gracias a la predicación de Jonás, toda la ciudad de Nínive da un giro de 180 grados! Se vuelve a Dios, hacia la vida en lugar de la destrucción. También hoy es todavía posible para nosotros hacer lo mismo, en nuestra sociedad de explotación de los pobres, de contaminación, de consumo excesivo. ¡Convirtámonos! Primera lectura Lectura de la profecía de Jonás (3,1-10): EL Señor dirigió la palabra a Jonás: «Ponte en marcha y ve a la gran ciudad de Nínive; allí les anunciarás el mensaje que yo te comunicaré». Jonás se puso en marcha hacia Nínive, siguiendo la orden del Señor. Nínive era una ciudad inmensa; hacían falta tres días para recorrerla. Jonás empezó a recorrer la ciudad el primer día, proclamando: «Dentro de cuarenta días, Nínive será arrasada». Los ninivitas creyeron en Dios, proclamaron un ayuno y se vistieron con rudo sayal, desde el más importante al menor. La noticia llegó a oídos del rey de Nínive, que se levantó de su t...
Gustavo Quiceno Jaramillo, Sacerdote misionero de La Diócesis de La Dorada-Guaduas, sirviendo en el Vicariato Apostólico de San Andrés y Providencia-Colombia. "Ay de mi sino evangelizo!", dijo Pablo. Estoy aquí también en X: @gadabay,con 140 caracteres para decirle a la gente que Dios los ama inmensamente.